Nos alojamos en Desert Springs a finales de julio, somos una familia de 5 miembros.
La Villa era de calidad superior, con piscina privada, muy bien equipada, espaciosa y muy limpia. Todas las propiedades de este complejo parecen estar bien posicionadas, así que si usted está buscando tener privacidad la tiene, si está buscando una piscina comunitaria con bar y demás elementos sociales lo tiene también en El Club Cocodrilo… rodeada de una magnifica zona para una cena informal, terrazas y mesas al aire libre, con una buena relación calidad-precio en la comida para una familia.
Las instalaciones de ocio son numerosas, para los no golfistas, hay mucho que hacer y ver, la costa está a sólo 15 minutos en Villaricos.
El campo de golf tiene un aspecto magnífico, y le aporta un ambiente de calidad a Desert Springs, hay un campo de prácticas y la posibilidad de tener clases de golf con un profesional también, junto con nuestro hijo tuvimos una clase de grupo por la mañana, proporciona una perfecta introducción a este deporte por muy poco dinero, además encontramos algunos nuevos amigos.
El restaurante principal, el bar y la casa club te aportan una sensación de expatriado, y la comida que comimos allí (dos veces) era genial. Un arroyo recorre el comedor y al anochecer te acompañan el croar de las ranas.
Lo que más voy a recordar de las vacaciones es la genuina amabilidad y la bienvenida por parte del equipo de Desert Springs.
Ellie, en particular, merece una mención y agradecimiento por estar siempre alegre y hacer que nuestros hijos se sientan tan especiales.
Desert Springs se caracteriza claramente por dar unas vacaciones de lujo y excepcionales, de ocio o como destino de golf, y la distancia hasta el aeropuerto de Murcia hace que sea atractiva una nueva visita, aunque sólo sea por un largo fin de semana.
Gracias Almanzora!